viernes, julio 13, 2007
EL LEÓN Y EL PERRO de LEÓN TOLSTOI
En un jardín zoológico de Londres, se mostraban las fieras al público a cambio de dinero o de perros y gatos que servían para alimentarlas.
Una persona que deseaba verlas, y no poseía dinero para pagar la entrada, cogió al primer perro callejero que encontró y lo llevó a la Casa de Fieras. Le dejaron pasar e inmediatamente echaron al perro a la jaula del león para que éste se lo comiera. El perro asustado se quedó en un rincón de la jaula, observando al león, que se acercó para olfatearlo.
El perro se puso patas arriba y empezó a menear la cola.
El león le tocó ligeramente con la pata y el perro se levantó, sentándose sobre sus patas traseras.
El león iba examinándolo por todas partes, moviendo su enorme cabeza pero sin hacerle el menor daño. Al ver que el león no comía al perro, el guardián de la jaula le echó un pedazo de carne. El león cogió un trozo y se lo dio al perro.
Al llegar la noche, el león se echó en el suelo para dormir y el perro se acomodó a su lado, colocando la cabeza sobre la pata de la fiera.
A partir de entonces, los dos animales convivieron en la misma jaula. El león no hacía ningún daño al perro, dormía a su lado y a veces incluso jugaba con él.
Cierto día, un señor visitó el zoológico y reconoció al perro que se había extraviado. Fue a pedir al director que se lo devolviera, y cuando iban a sacarlo de la jaula el león se enfureció y no hubo forma de conseguirlo.
Así, el león y el perro siguieron viviendo en la misma jaula durante una año entero.
Al cabo de un año, el perro se puso enfermo y murió.
El león dejó de comer, se puso triste y olfateaba al perro, lamiéndolo y acariciándolo con la pata.
Al comprender que su amigo había muerto, se enfureció, empezó a rugir y a mover la cola con rabia, tirándose contra los barrotes de la jaula, como queriendo destrozarla.
Así pasó todo el día. Luego se echó al lado del perrito y permaneció quieto, pero no permitió que nadie se llevara de la jaula el cuerpo sin vida de su amigo.
El guardían creyó que el león olvidaría al perro si metía a otro en la jaula, y así lo hizo, pero, ante su asombro, vio cómo lo mataba en el acto, devorándolo.
Luego, se echó nuevamente, abrazando al perro muerto y permaneció así durante cinco días. Al sexto día, el león también murió.
jueves, julio 05, 2007
VOTE POR MACHU PICCHU SOLO FALTA UN DIA
SIETE RAZONES POR LAS QUE DEBE VOTAR POR MACHU PICCHU
1. Para que en vez de asistir a la escuela, mas ninhos andinos, a vista y paciencia de las autoridades, se paseen por la plaza mayor de la ciudad del Cuzco gritando 'picture, mister, one dollar'.
2. Para que el Presidente de la Republica siga regalando mas casaquitas y frazaditas a nuestros hermanos que padecen las heladas en el sur andino en vez de lograr que se les instale calefaccion en sus hogares.
3. Para que los limenhos sigan ilusamente pensando que los turistas vienen al Peru porque les fascina su ciudad capital.
4. Para que sigamos viviendo del guano de la ruina hasta que una manhana nos despertemos sin la gallina de los huevos de oro y nos lamentemos de no haber encontrado el sustituto del guano planificadamente.
5. Para que se vendan millonadas en polos de Inka Kola y Cuzquena engrosando asi
los bolsillos de empresas trasnacionales.
6. Para que aumente el turismo nacional, asi, los limenos nos daremos cuenta que Arequipa cuenta con mejor clima y comida,decidiendo por eso invadirla masivamente,
cambiarle el nombre a Lima, la ciudad blanca, expulsando por ultimo a los indeseables characatos hacia un territorio costero caracterizado por su cielo panza de burro, es decir, Arequipa, la ciudad gris.
7. Para que nos sintamos orgullosos de ser peruanos.